Tres hechos de delincuencia llamaron la atención en las últimas horas, no solo por la magnitud sino por el "profesionalismo" que denotan.

En todos ellos participaron entre siete y diez personas fuertemente armadas, nada improvisadas, con guantes, rostros cubiertos y, en un de los robos, vestidos de policias. 

El primero de ellos ocurrió el 16 de marzo en Regina, cuando diez sujetos fuertemente armados ingresaron a robar al establecimiento agropecuario "Don Manuel" y después de atar y golpear al menos a dos empleados, huyeron del lugar llevándose tres camiones, bidones de herbicida, herramientas varias y hasta objetos personales de los empleados.

El segundo hecho ocurrió en Regina el sábado cerca de las 20. Al menos nueve sujetos participaron de un nuevo asalto comando en el domicilio de una propietaria de un kiosco. Los delincuentes, vestidos con indumentaria policial, llegaron en dos vehículos e ingresaron al domicilio de forma violenta por la parte trasera aludiendo que tenían una orden de allanamiento.

Por último, el tercer acto delictivo fue en cercanías de Guerrico este lunes por la madrugada. Los sujetos, al menos siete, rompieron el sistema de cámaras de vigilancia, sorprendieron al empleado de seguridad, lo redujeron y robaron, en un galpón, cerca de 400.000 pesos en efectivo y documentación importante.

Todos estos hechos reúnen cosas en común. En todos los casos hubo al menos siete personas actuando, portaban armas de distintos calibres y en al menos dos de ellos utilizaban chalecos antibalas.

Además por el modus operandi, dejaron en claro que no eran improvisados, que sabían a donde iban a cometer el ilícito, cómo y contra quiénes.

Otro de los datos a destacar es que en ningún caso ejercieron violencia excesiva contra las personas, más allá del acto delictivo en sí, que no deja de ser violento, solo se supo que hubo personas reducidas, atadas y apuntadas por armas, pero no se denunciaron heridas en las víctimas.