A principios de la temporada, la Autoridad de Cuencas realizó un pormenorizado estudio sobre el estado de las aguas en los balnearios habilitados de la región. El resultado general fue bueno, con lugares aptos para actividades recreativas, ya que los valores encontrados se encuentran por debajo de los parámetros internacionales. Pero… en ese estudio no figuraba General Roca.

El secretario de Gestión Ambiental de la AIC, Héctor Labollita, explicó que en esta jurisdicción desde haya ya algunos años es el municipio el que se encarga de realizar los análisis. Los funcionarios roquenses, en tanto, explicaron que en el sector conocido como “el piletón” de Apycar se realizan controles periódicos que siguen dando bien.

Seguí leyendo: ¿Cómo está la situación sanitaria de los ríos de la región?

“Se vacía los jueves, se limpia y se vuelve a llenar los viernes”, explicaron desde la municipalidad.

En cambio, no se analizan las aguas del curso principal del río, ya que no es un balneario habilitado.

En los espacios más cercanos, el único que debe realizar un seguimiento más estricto es el de Cervantes. El promedio de las cinco muestras recogidas en el río dio 177 NMP de la bacteria escherichia colli, cuando el límite máximo para actividades recreativas es de 200 NMP. Sin embargo, la advertencia indica que una de las muestras arrojó un número más alto.

Labollita explicó que la presencia de esta bacteria no es exclusivamente producto de un sistema de descargas cloacales próximo. “A veces puede suceder que hayan pasado animales; o pájaros, y dejaron una sobrecarga en el río. El indicador de ‘Vigilancia’ es para que se realicen más controles”, precisó.

En el resto de los balnearios del Alto Valle los resultados han sido buenos: Mainqué (39 nmp), Huergo (62), Villa Regina (31) y Chichinales (37), fueron considerados aptos sin reservas. En tanto, los estudios de los centros recreativos de Allen y Cipolletti no estaban terminados.

Leé también: ¿Cómo vienen los ríos de la región? Atentos a las variaciones de caudal

En el Valle Medio, los centros recreativos han sido considerados como aptos: Chelforó (15 nmp), Chimpay (9), Darwin (64); Choele Choel (20), Luis Beltrán (6); Lamarque (26), y Pomona (60).

El responsable de la Gestión Ambiental de la AIC apuntó que para la definición de la aptitud de las aguas en las áreas evaluadas “se adoptaron los criterios expuestos por las Guías Canadienses de Calidad de Agua”. De allí surge la medida de 200 NMP cada 100 ml como límite máximo.

Algunos de los centros recreativos de mayor atración de la región fueron declarados aptos: el lago Pelegrini (apenas 2 nmp); Los Barreales (22) y Mari Menuco (2).

En cambio, los cinco balnearios ubicados en la ciudad de Neuquén fueron considerados “aptos” pero con la necesidad de mantener la vigilancia durante la temporada, con la misma recomendación que en el caso de Cervantes. Al menos una de las muestras dio un resultado superior al máximo tolerable para el uso recreativo del agua.