Desigualdad en ingresos: el 20% de la población más rica gana más de $200.000, según el INDEC
El informe del INDEC revela qué porcentaje de la población pertenece al grupo de mayores ingresos y cómo esta desigualdad impacta en la economía.

En el segundo trimestre del 2023, el 62,4% de la población ocupada en Argentina percibió un ingreso promedio de $138.595, según el informe del INDEC. Sin embargo, este promedio oculta una realidad alarmante: el 20% de la población con mayores ingresos gana más de $200.000. Además, aquellos que perciben más de $280.000 se encuentran en el grupo más rico del país.
De acuerdo con los resultados del informe, en ese mismo trimestre, la suma total de ingresos para la población de referencia fue de $2.566.826 millones, lo que representó un aumento del 111,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior. No obstante, debido a la inflación interanual promedio del 113%, en términos reales cada habitante del país sufrió una caída de casi un 2% en su ingreso.
Analizando la escala de ingreso individual, se observa que el estrato más bajo, que abarca los deciles 1 a 4, tiene un ingreso promedio de $51.196.
En cambio, el estrato medio, comprendido por los deciles 5 a 8, tiene un ingreso promedio de $132.455.
Por último, el estrato alto, que incluye los deciles 9 y 10, tiene un ingreso promedio de $325.695.
Además, se destaca que los hombres tienen un ingreso promedio de $161.252, mientras que las mujeres reciben en promedio $116.584.
Esta desigualdad en la distribución de ingresos tiene repercusiones en la economía. Mientras que el 40% de la población más pobre experimentó un deterioro del 5,13% en su ingreso, el 20% más rico sufrió un retroceso del 1,8%. Los estratos medios, por su parte, fueron los menos afectados, con una caída del 1,5% en sus ingresos individuales.
El aumento acelerado de la inflación es uno de los factores que explican esta situación económica. Según los datos del INDEC, en agosto, la canasta básica aumentó un 14,3%, alcanzando los $284.687 para que una familia no sea considerada pobre. Mientras tanto, la canasta básica alimentaria tuvo una suba del 17% con respecto a julio, llegando a los $130.590 para cubrir las necesidades alimentarias básicas y no caer en la indigencia.
La desigualdad en la distribución de ingresos es un desafío que enfrenta Argentina. Estos datos revelan la necesidad de implementar políticas que busquen reducir las brechas y promover una distribución más equitativa de la riqueza en el país.