Hartos de convivir con los pozos y las roturas permanentes en el asfalto, problema que le adjudican casi en exclusivo a la empresa Aguas Rionegrinas Sociedad Anónima (ARSA), los vecinos y vecinas de barrio Los Olmos decidieron buscar otra manera de manifestar su enojo.

Hasta media mañana habían marcado y fotografiado 20 roturas, que ya forman parte del paisaje del barrio. Es un conflicto de vieja data y un sufrimiento para frentistas que padecen todo tipo de problemas: lagunas de líquidos cloacales, inundaciones y calles rotas. Ya ni la paciencia ni los vehículos aguantan más.

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Es que ya han reclamado por distintas vías y aunque muchos de los baches y las roturas generadas cuando se realizan arreglos, han sido tapadas, el problema no se resuelve.

Por eso resolvieron salir con pintura roja a pintar el número de cada una de las roturas y dieron aviso a los medios de comunicación para que su reclamo quede asentado en algún lado.

 
La mayoría de los números quedaron perpetuados sobre calle José Ingenieros, pero también en las transversales hay baches y cráteres aun por pintar.
De este modo, el grupo de vecinos y vecinas espera una solución.