El papá de la adolescente amenazada por sus compañeros del colegio secundario, Germán Bernales Hinrichsen, manifestó su contrariedad por las derivaciones que ha tenido el caso de su hija. Por un lado, tuvo la satisfacción de un encuentro con las máximas autoridades del sistema educativo, incluido el nuevo ministro, Pablo Núñez. Por otro, la sensación de que el problema es más profundo y no se va a solucionar con buenas intenciones.

“¿Entonces? Pues bien, la traducción es la siguiente: estamos con vos pero tendrás que convivir con tus victimarios. Esa es la resolución ante casos de Bullyng en la provincia de Río Negro”, escribió en sus redes sociales.

Bernales había denunciado que su hija, que asiste a primer año en el Colegio Secundario 17 de Cipolletti, está siendo objeto de bullying y hasta de amenazas de muerte por un grupo de su mismo curso. Aportó audios de un grupo de whatsapp donde se planeaba incluso llevar un arma al establecimiento.

Luego se reunió con el ministro Núñez; con Patricia Lucera, Coordinadora Provincial de Secundarios y Graciela Segatori, Coordinadora del Consejo de Educación local. En ese encuentro se acordó implementar un trabajo de concientización sobre el bullying, el acoso y hostigamiento escolar, y sus consecuencias. Otro equipo se reunirá con la adolescente víctima de la violencia para conocer sus necesidades y su situación psicológica y emocional.

El padre apuntó que el bullying “no afecta solo a la víctima y su familia, sino, a toda la sociedad en su conjunto”. Y frete a las críticas que recibió, pidió “ponerse en lugar de padre y vivir en primera persona lo que hoy pasamos como familia. Nadie espera ver cómo a un(a) hijo(a) se lo maltrata por sus pares en el colegio. Creo que nadie desea vivirlo. Tampoco el resto de la comunidad”.

En otro posteo, definió que “estos días de infierno han sido -a su vez- de aprendizaje” porque le permitió “qué es el Bullying y sus consecuencias”. Y a su criterio, “el sistema tiene serios vacíos legales de protección al superponerse derechos: por un lado, existe la "ley de Bullyng" que tiene todo un marco de acción que termina cuando aparece la "ley de convivencia" de aplicación para las escuelas de todo el país.

Siguiendo su razonamiento, entiende que en el caso de su hija, “el bien jurídico del derecho a la vida jamás ha sido garantizado” por lo cual “sus derechos están siendo vulnerados por un sistema que no prevé estás situaciones extremas de Bullying”.

“Los derechos de los niños gozan de jerarquía constitucional en el ordenamiento jurídico nacional ¿qué quiere decir esto?... qué es ley nacional aplicable, pero la aplicación NO RIGE para víctimas, por lo menos, en estos casos puntuales”, sostuvo.