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La receta electrónica será obligatoria en todo el país: cómo funcionará y qué pasará con las de papel
A partir del próximo 1° de julio, la receta electrónica se convertirá en un requisito obligatorio en toda Argentina. Mediante una nueva reglamentación establecida por el Gobierno nacional, específicamente el decreto 345/2024, se busca mejorar el acceso a los medicamentos y tratamientos de forma más eficiente y segura para todos los ciudadanos.
Esta medida, que marca un importante avance tecnológico en el sistema de salud, tiene como objetivo principal garantizar una prestación de servicios más ágil y segura para los pacientes. Además, busca facilitar la identificación de los profesionales que prescriben medicamentos, brindando mayor transparencia y confiabilidad a los tratamientos.
La implementación de la receta electrónica contempla la integración y estandarización de las plataformas digitales ya existentes en el sistema de salud, la creación de un diccionario nacional de medicamentos y un seguimiento eficaz del tratamiento de los pacientes.
Hasta el 1° de julio, tanto las recetas en formato papel como las recetas digitales serán aceptadas y válidas. Sin embargo, una vez que entre en vigencia la obligatoriedad de la receta electrónica, solo esta última será considerada válida para la venta y despacho de medicamentos.
En cuanto a la venta y despacho de medicamentos bajo receta, se establece que debe realizarse en presencia de un farmacéutico responsable, ya sea el director técnico o un farmacéutico auxiliar. La entrega de los medicamentos podrá ser acordada por canales electrónicos determinados por la farmacia, permitiendo la comodidad del paciente.
Es importante destacar que la farmacia debe asegurar que el transporte de los medicamentos se realice de manera segura y cumpliendo con los requisitos establecidos por la autoridad sanitaria. Además, las farmacias tienen la obligación de archivar y conservar las recetas digitales durante un período de 3 años.
La receta electrónica se emite a través de un soporte digital, ya sea mediante un formulario electrónico o una aplicación designada. En este documento se consignan los datos esenciales del paciente, su afiliación médica, el detalle de la medicación prescrita y una firma digital del profesional de la salud.
Una vez que la receta electrónica está debidamente confeccionada, se transmite al paciente mediante canales digitales como mensajes de texto, correos electrónicos o plataformas de mensajería instantánea. Esto permite al paciente enviar directamente la receta a la farmacia, minimizando el tiempo de espera en el establecimiento, tal como ocurre en otros países donde este sistema ya está implementado.
