Una militante de la agrupación H.I.J.O.S. fue víctima de un violento ataque en su propio hogar, donde fue golpeada, abusada y amenazada de muerte por dos individuos armados, según reveló la red nacional de la organización. El hecho ha sido denunciado como un "atentado contra la vida" y quienes lo perpetraron habrían dejado claro que el objetivo no era robar sino asesinar a la activista. La Agrupación H.I.J.O.S. responsabiliza al Gobierno nacional por este deplorable suceso.

El incidente ocurrió el pasado 5 de marzo, cuando la víctima regresó a su departamemento después de su jornada laboral. Al entrar, se encontró con la sorpresa de que dos hombres armados estaban dentro de su hogar. La cerradura había sido forzada y días antes se había observado a hombres preguntando por ella en el vecindario.

La descripción del terrible asalto fue incluida en la denuncia policial presentada por la militante al día siguiente de los hechos. Según su testimonio, uno de los atacantes la inmovilizó mientras el otro la amenazaba con violencia y dejaba claro que este acto tenía un trasfondo político debido a su militancia en derechos humanos y feminismo.

Antes de retirarse, los atacantes dibujaron en una de las paredes de la vivienda “VLLC”, el slogan del partido de Gobierno, La Libertad Avanza, y las siglas con las que el Presidente Javier Milei firma sus mensajes.

En el comunicado que comenzó a circular esta mañana, la agrupación responsabiliza al Gobierno nacional y exige “el inmediato esclarecimiento del hecho por parte del Poder Judicial”. “A días de cumplirse un nuevo aniversario del golpe de Estado afirmamos que nuestro pueblo dijo "Nunca Más, Memoria, Verdad y Justicia siempre".

“Este es un mensaje a la agrupación y a todo el movimiento de derechos humanos”, interpretó Agustín Cetrángolo, referente de la regional Ciudad de Buenos Aires de H.I.J.O.S.

La joven activista sufrió múltiples agresiones físicas y psicológicas durante el ataque. Antes de irse, los atacantes le advirtieron que si gritaba regresarían para dispararle. Además, dejaron escrito en la pared un mensaje que ha sido percibido como una amenaza hacia la agrupación y el movimiento de derechos humanos.