Alquileres golpean a los bolsillos: suben 164% en marzo

Los bolsillos de los inquilinos recibirán un duro golpe en marzo, ya que los contratos de alquileres que se actualizan anualmente sufrirán un incremento del 164,06%. A pesar de este importante aumento, cabe destacar que se encuentran por debajo de la inflación registrada durante el último año, que se estima entre 275% y 288%.

Según la Ley de Alquileres N°27.551, los contratos acuerdan la actualización de los precios mediante el Indice de Contratos de Locación (ICL). Esto significa que un inquilino que actualmente paga 200 mil pesos, pasará a abonar 528.120 pesos. Sin embargo, en caso de que el contrato finalice, el propietario tiene la posibilidad de solicitar un monto diferente para la renovación.

Es importante destacar que, a partir de la derogación de la ley de alquileres impulsada por el Gobierno de Javier Milei, los nuevos contratos de alquiler ya no están obligados a regirse por el ICL. Ahora las partes son libres de decidir el índice que deseen para la indexación, además de no ser anuales, ya que se acuerda de antemano. Este cambio en la regulación ha generado un gran impacto en el mercado de alquileres, que ahora retorna al régimen establecido por el Código Civil y Comercial, aunque cabe recalcar que también ha sufrido modificaciones.

Actualmente, la mayoría de los nuevos contratos se están realizando por un plazo de dos años, en pesos y con actualizaciones trimestrales basadas en el índice de inflación. Sin embargo, también se ha abierto la posibilidad de realizar contratos en moneda extranjera o en criptomonedas, a elección de las partes involucradas. Con la falta de un índice de indexación obligatorio, algunos contratos incluso basan sus actualizaciones en el aumento del precio de las naftas.

Estos cambios en el mercado de alquileres representan un desafío para los inquilinos, que deberán evaluar detenidamente las condiciones de los contratos y anticiparse a los incrementos en los costos de vivienda. Asimismo, es fundamental contar con información clara y actualizada sobre las tasas de inflación y los índices utilizados para el cálculo de las actualizaciones, a fin de tomar decisiones financieras informadas y proteger así sus bolsillos.