El viernes se inició un expediente por un posible abuso sexual cometido por un jugador (o varios) de la delegación sub 20 de Irak que se concentra en el Hotel Dazzler de La Plata de cara al debut por la Copa Mundial de la categoría.

Luego de que la Policía bonaerense hiciera una recorrida por los complejos donde se hospedaban los planteles, se elevó una queja por destrozos causados teóricamente por el contingente iraquí. Sin embargo, su asociación de fútbol emitió un comunicado oficial para desmentir todo tipo de denuncias.

“La dirigencia de la delegación del equipo juvenil desmiente las inexactas noticias y rumores difundidos por algunos sitios web argentinos la mañana de este viernes, respecto a problemas al interior de la residencia de nuestra cantera “, comienza el texto. El mismo no hace referencia específica a la denuncia por abuso sexual contra una empleada, a los daños provocados en el hotel ni a los malos tratos referidos por el personal.

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Tras ello, la federación iraquí asegura: “El liderazgo de la delegación confirma que las cosas están bien y que no hay nada que perturbe la paz de la delegación. Todos deben mostrar responsabilidad y ser cuidadosos al tratar la información, especialmente porque la selección nacional está esperando un partido importante”.

Por último, hace un llamamiento a los fanáticos y a los medios del país árabe a “estar de pie y apoyar al equipo, y subir la moral de los jugadores para presentarse de la mejor manera en el Mundial”.

Empleados del alojamiento donde se hospeda la delegación asiática informaron que los futbolistas habían activado alarmas de incendio y aspersores. También indicaron que originaron otros disturbios que consternaron a otros clientes. La causa cayó en manos del fiscal Álvaro Garganta, de la UFI N° de La Plata, junto a una denuncia que finalmente no se radicó por el supuesto abuso sexual contra una empleada.