La Oficina Judicial postergó por pedido del defensor de Tortoriello, la audiencia por la causa Techo Digno. El debate será el próximo 3 de abril, donde el diputado nacional deberá explicar junto a otro exindentende, Ariel Baratti, cómo fue el manejo de fondos de la construcción de unas 600 viviendas en Cipolletti.

La teoría de la fiscalía es que se malversaron fondos y que además se los robaron. La posición de Tortoriello es que “se trata de una causa para desprestigiarme”, y habló de especulación política.

En octubre pasado, el abogado Gustavo Palmieri, representante de Tortoriello presentó un pedido de aplazamiento de esta audiencia, alegando que al haber tomado la defensa hace menos de 60 días, necesitaban más tiempo para conocer todo el expediente. La ausencia del letrado en la audiencia tampoco permitió establecer una fecha clara para realizar la formulación de cargos.

Todas las partes involucradas en el proceso, abogados de los investigados, Fiscalía y defensa pública, estuvieron de acuerdo con el pedido de aplazamiento, considerando que las razones esgrimidas por Palmieri son razonables.

Por lo tanto, el 3 de abril próximo se conocerá con precisión cuál es la acusación del Ministerio Público Fiscal de Cipolletti. También está involucrada la exfuncionaria y contadora Lucila Chiocconi y los constructores Arturo Mendiberri, Domingo Mocciola y Daniel Zoppi. Esta causa se enmarca en un proceso judicial por administración fraudulenta en la construcción de viviendas.

Techo Digno fue un programa habitacional del último mandato presidencial de Cristina Fernández. A través de convenios locales, el dinero de las obras se giraba a los municipios, que debían certificar el avance de los proyectos y pagar a las empresas. En 2019, con el cambio de administración nacional, se descubrió que en muchas ciudades del país hubo desvío de fondos por plata recibida en municipios en los que no se habían hecho las obras.

Si bien el candidato a gobernador del PRO defendió a su antecesor, porque “todos los fondos enviados por Nación estaban en una cuenta especial”, contó que en noviembre del 2015 Baratti presentó “un certificado de final de obras” cuando esas construcciones “estaban en un 30% y pico. Eso fue muy anormal”, consideró.