Durante su breve gira por el Alto Valle, la gobernadora Arabela Carreras fue consultada sobre su futuro político: la intendencia de Bariloche o una diputación nacional. La mandataria evitó una respuesta directa: argumentó que se definirá luego de las elecciones provinciales, previstas para el 16 de abril, en función de “una estrategia de conjunto”. También expresó que se trata de un año “complejo” desde la gestión.

“Primero habrá qué va a ser del destino de Río Negro. Estamos muy esperanzados en tener el acompañamiento nuevamente del pueblo de la provincia, esta vez con la candidatura de Alberto Weretilneck. A lo largo de ocho años ha demostrado su capacidad de gestión; nuestra provincia cambió a partir de su gestión”, fue su primera respuesta.

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Luego hizo referencia a las dificultades macroeconómicas que enmarcan la coyuntura: “se tratará de un año complejo, voy a tener gran parte de la energía puesta allí. Después de la elección provincial volveremos a analizar cuáles son los escenarios y cuales son las oportunidades”, dijo.

Sí reconoció que con posterioridad a la gran elección provincial hay dos instancias que sí le interesan: la diputación nacional o la intendencia de Bariloche, “que me resulta sumamente atractiva”.

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“No hemos tomado ninguna decisión; tenemos que conversar mucho dentro de la fuerza política y lo haremos después de lograr un éxito, una ratificación del rumbo de la provincia”, puntualizó.

En ese sentido, expresó que “ambos roles son desafiantes, son interesantes. El servicio público a través de la política me parece relevante, porque es una herramienta de transformación de la sociedad que da muchas satisfacciones cuando una ve que puede contribuir al mejor vivir de nuestros vecinos, de nuestra provincia. Estoy con expectativas de poder seguir contribuyendo desde ese lugar”.