Llega diciembre y, aunque la faena clandestina es un delito que se evidencia durante todo el año, aumenta en estas épocas. Es por ello que las organizaciones proteccionistas y la Sociedad Rural del Alto Valle advierten sobre esta situación y llaman a los dueños de equinos u otros animales extremar cuidados.

Es que, para estas fechas, los cuatreros comienzan a actuar con mayor frecuencia, ya que buscan la carne de caballo, reses u otro ganado para utilizarla en las comidas de las Fiestas de fin de año.

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Tan solo este domingo, en la zona de Puente Cero en Cervantes, la desesperación se apoderó de una familia que intuye que su caballo fue robado por desconocidos.

Los reportes de robos de animales o abigeato -como es su terminología jurídica- se repiten semana tras semana en Roca y alrededores. Por esta razón, desde la Sociedad Rural del Alto Valle manifestaron su preocupación por el aumento de los casos y pidieron una mayor seguridad para sus productores asociados.

Según expresaron, el hurto -principalmente de equinos- tiene como único propósito la posterior faena y desposte de los animales. 

A pesar de que desde la entidad rural realizan encuentros anuales con las autoridades para reforzar la seguridad, los recursos con los que cuentan para la vigilancia del sector son  escasos y las jurisdicciones imposibles de abarcar.