En las últimas dos semanas, se han producido numerosos robos de medidores de agua en distintos puntos de la ciudad, y la mayoría de los hechos tuvo lugar en las 210 viviendas, en la zona comprendida entre calles Evita, Newbery, Ruta 6 y Damas Patricias.

Para reponer el medidor y de ese modo volver a tener servicio, a los damnificados no les queda más opción que asumir el costo de un artefacto nuevo: Sale un poco más de 12.000 pesos.

La empresa ARSA, a cargo del servicio, es la encargada de suministra el nuevo medidor y realiza el descuento en cuotas al usuario.

La situación ha generado tanto enojado entre quienes han sido víctimas de este delito, que al momento de colocar el contador nuevo muchos han optado por implementar medidas de seguridad.

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Una de las acciones desarrolladas es cementar el nicho y solo dejar a la vista las agujas para que los encargados de medir el consumo puedan hacerlo.

Fuentes policiales indicaron que el robo tiene como objetivo la venta de los medidores ya que en su interior tienen piezas de bronce, por lo que encuentran un mercado paralelo clandestino para la venta