La audiencia de formulación de cargos por el homicidio calificado de Maximiliano Segura no pudo continuar porque el imputado no se encontraba en condiciones físicas de comprender lo que ocurría a su alrededor. El hecho en cuestión ocurrió el sábado a la tarde, en el local de la UOCRA en Catriel. En un confuso episodio que sigue siendo materia de investigación, Raúl Verón sufrió una fractura de cráneo con hundimiento luego de acuchillar a Segura, quien falleció poco después.

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Verón permaneció internado en terapia intensiva del Hospital de Cipolletti hasta ayer a la tarde, cuando se le dio el alta y fue trasladado a una celda de la comisaría de Villa Manzano. Sin embargo, continuó quejándose de diversos dolores y tuvo que ser revisado por el médico del nosocomio de Campo Grande. El facultativo le recetó una medicación y recomendó su traslado a una unidad más próxima a un centro asistencial de mayor complejidad por cualquier eventualidad.

Este mediodía estaba planificada la audiencia de formulación de cargos y la jueza Agustina Bagniole debía definir si las pruebas son suficientes como para continuar con el juicio. Sin embargo, dos situaciones se interpusieron: primero, el pedido del defensor particular José Luis Rishman, quien pidió más tiempo para analizar los hechos. Y hubo un acuerdo con la fiscalía que conduce Gustavo Herrera para postergar la audiencia hasta el lunes.

El segundo hecho tiene que ver con el estado del acusado: en las dos oportunidades que lo interrogó la jueza Bagniole, respondió tomándose la cabeza, gesticulando y diciendo que tenía dolores y mareos que lo confundían.

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Ante esa situación, la magistrada dispuso que se le realicen nuevas pericias en el Hospital Moguillansky, de Cipolletti; y que luego el Cuerpo Forense determine si está en condiciones de comprender lo que está ocurriendo. En principio, la audiencia continuará el lunes.

Verón está acusado de haber ultimado de dos puñaladas a Maximiliano Cabrera, un delegado de la UOCRA en Catriel, de 28 años, después de una confusa discusión. Al parecer, existiría un conflicto de tiempo atrás entre Verón y los dirigentes gremiales, a quienes les alquilaba el local donde funciona el sindicato en la localidad petrolera. Los sindicalistas lo acusaban de varios robos cometidos en el lugar, pero nunca se materializaba en una denuncia.

El sábado, Verón ingresó al predio y comenzó una discusión que fue subiendo de tono. En un momento empezaron los empujones. Según un testigo, en ese forcejeo Cabrera habría tropezado, cayendo al piso; situación que Verón aprovechó para abalanzarse sobre la víctima y asestarle una profunda puñalada debajo de la axila.

A pesar de la asistencia médica y de los desesperados intentos, Cabrera falleció en el hospital de Catriel horas después.

El fiscal adelantó que pedirá cuatro meses de prisión preventiva. Las fuentes cercanas a la acusación adelantaron que pedirán calificar el hecho como un homicidio calificado por alevosía, con lo cual podría corresponderle cadena perpetua.