Ramiro Gutierrez permanece en prisión preventiva en Cipolletti hace más de siete mes tras quedar imputado por el asesinato de Facundo Castillo.

Por aquellos días, luego de haber estado profugo varias horas, se entregó a la Justicia presentando una fractura doble maxilar. Por ello, la defensa solicitó que permaneciera con preventiva en la Comisaría Cuarta de Cipolletti. El pedido fue aprobado ya que necesitaba de una asistencia médica particular que en un penal no le iban a poder ofrecer.

Según dio a conocer el medio LMCipolletti, el próximo 10 de agosto tiene su último turno con el cirujano maxilofacial y, a partir de ese momento, estaría en condiciones de ser trasladado al Establecimiento de Ejecución Penal N°1 de Viedma, lugar donde esperará e juicio.

El crimen de Facundo Castillo

Todo ocurrió durante la mañana del domingo 19 de diciembre de 2021. Facundo Castillo y un grupo de amigos caminaban por la calle Julio Salto, a la salida de un boliche bailable de Cipolletti, cuando fue embestido por una camioneta de alta gama ((una BMW X1, valuada en 60.000 dólares). El vehículo era conducido por Ramiro Agustín Gutiérrez, un joven de Roca que tras la acción se dio a la fuga.

Los testigos que salían en ese momento del boliche coincidieron en sus testimonios: el conductor de la camioneta había salido realizando una acción imprudente, lo que le fue recriminado por Castillo. Minutos después, cuando el grupo de Facundo caminaba hacia la ruta 22, la camioneta regresó, aceleró y apuntó directamente hacia ellos. Algunos alcanzaron a tirarse a un costado. Facundo no lo logró.

El hecho provocó una gran conmoción en vísperas de las fiestas de fin de año. Algunos días después, Gutiérrez se entregó a la justicia tras fracasar un intento de mediación encabezado por su padre. Ofrecía 5 millones de pesos como caución para que le dieran prisión domiciliaria. La causa fue caratulada como homicidio y el mes pasado se rechazó un pedido de la defensa para cambiarla a “homicidio culposo”.

Voceros de Tribunales indicaron que el caso podría encaminarse a un juicio por jurados. Entre líneas, se lee que la causa podría justificar una condena mayor a los 15 años.