La estepa, esa gigantesca región casi desconocida para muchos rionegrinos, puede ser la puerta de entrada para una experiencia turística totalmente diferente. Una ventana a encontrarse con un mundo que creías perdido: disfrutar de cabalgatas por escenarios donde el horizonte es tu línea de mirada; practicar rafting por escenarios casi inexpugnables; reencontrarte con sabores y aromas naturales. ¿Cómo llegar? Para empezar, animándote a transitar por la ruta nacional 23, que está pavimentada casi en su totalidad, y entrar en algunos de los pueblos que están a su vera. Animate.

La ruta nacional 23 atraviesa esa estepa y permite tener un acercamiento a ese mundo tan patagónico y tan agreste como atractivo. Tiene 600 km de extensión y une la provincia de Río Negro de este a oeste entre Las Grutas y Dina Huapi.

Es un mercado en desarrollo, y como tal tiene el encanto de lo poco programado. El gran esfuerzo del ministerio de Turismo provincial es afianzar estos destinos para que la región tenga otra fuente de ingresos y al mismo tiempo garantizar a los turistas un clima de seguridad y accesibilidad que lo vuelvan confiable. Mariela Messina, subsecretaria de Desarrollo Turístico de Río Negro, explicó que se está produciendo un doble fenómeno que tiene que ver con la mayor circulación en la ruta por la pavimentación. Por un lado, los viajeros empiezan a descubrir los pueblos y estimula su curiosidad. ¿Qué hay allí? ¿Qué vida, qué cultura, que hizo que esta población se instalara en este lugar?

Al mismo tiempo, los lugareños ven el tránsito, observan que algunos se animan a entrar y piensan: el turismo puede ser una alternativa.

El Ente para el Desarrollo de la Región Sur, compuesta por los municipios de la zona, desarrolló un sitio web por demás interesante: www.realpatagonia.com.ar. En ese link encontrarás la amplia gama de ofertas y servicios que los pueblos de la estepa empiezan a desarrollar para mostrar su cultura y su forma de vida.

Costos y servicios

Mariela Messina no quiere crear falsas expectativas. Todo está en desarrollo. Las actividades se realizan en la medida de las posibilidades y de la naturaleza. “Por ejemplo, la esquila se realiza cuando es época de la esquila. Corderito patagónico, habrá en la época en que hay corderos. No está sistematizado. El turismo es una alternativa más para la gente y uno tiene que estar dispuesto a disfrutar de ese momento”, comentó.

Pernoctar una noche en un hotel de la Región Sur, puede tener un costo aproximado de 4.500 pesos la habitación doble. La gastronomía, en tanto, tiene un costo similar a la del resto de la provincia. Dependiendo de las alternativas, a partir de 1.000 pesos por persona.

Un mundo diferente

La Región Sur tal vez ofrezca el escenario que está más asociado a la imagen Patagonia en el mundo: la estepa, la vida en la naturaleza agreste, escenarios poco habitados y el contacto con las condiciones de vida más esenciales. Desde los diferentes puntos de la “Línea” se puede acceder a sitios de interés histórico, visitar a los artesanos que trabajan en sus talleres domiciliarios, o realizar excursiones por la meseta de Somuncura, con su vegetación y su fauna de características tan especiales.

“Todo es muy llamativo para el turista, sobre todo para el extranjero. Estamos trabajando para incorporar infraestructura pública, necesaria para que esté la presencia del Estado; pero también trabajamos mucho en la capacitación y formación de los emprendedores regionales. Estamos en un buen comienzo”, puntualizó Messina.

La Trochita, un emblema

Uno de los paseos más buscados por los turistas es el de La Trochita, el mítico tren de trocha angosta que unía Ingeniero Jacobacci con Esquel y que despertó todo tipo de historias y fantasías. De aquella época sólo queda esta excursión de unos pocos kilómetros entre Jacobacci y Ojo de Agua. “Este año vamos a inaugurar un parador adaptando una construcción ferroviaria. También se realizará una parada en el sitio conocido como “Empalme – Apeadero”. La temporada comenzará el 11 de diciembre”, precisó la funcionaria. En esta temporada, en principio funcionará solamente los días sábados.

Jacobacci fue históricamente un centro ferroviario de gran importancia. Allí se hacía el trasbordo de cargas y pasajeros que venían desde Buenos Aires y debían seguir hacia la región cordillerana del sur rionegrino y el norte de Chubut. Jacobacci era la estación donde se hacían recambios de equipos y personal para continuar hacia Bariloche por la trocha ancha. Y de allí que permanezca todavía una gran cultura relacionada con los rieles.

Una alternativa para quienes deseen viajar desde Viedma es embarcar en el Tren Patagónico, que sale los viernes y llega a Jacobacci los sábados. Hacer el circuito de La Trochita y regresar con la formación del tren hacia Viedma el domingo.