Este fin de semana, unas vecinas de Roca que caminaban por la zona del aeropuerto encontraron residuos patológicos de Covid-19 que habían sido deshechados en bolsas transparentes.

El hallazgo se produjo a metros del cerco perimetral de la pista de aterrizaje, una zona donde circula la gente del barrio. Allí fue donde encontraron los dispositivos de test rápidos de Covid-19 que aparentemente habían sido utilizados, ya que algunos contaban con nombre y apellido. 

Según confirmaron fuentes de Salud consultadas, este tipo de tests son utilizados en privados y no pertenecerían al Hospital Francisco López Lima. Además, adelantaron que los residuos patólógicos del nosocomio local se deshechan en bolsas negras o rojas. Y explicaron que los residuos son retirados cada día por la empresa Zavecom, que tiene a su cargo la recolección y posterior destrucción de ese tipo de material.

Según la Ley 24.051 que dispone el marco para la generación, manipulación, transporte, tratamiento y disposición final de residuos peligrosos, toda infracción supone una multa de cincuenta millones de australes convertibles, apercibimiento y/o cancelación de la inscripción al Registro de manipulación de residuos peligrosos. 

De momento, se espera que la Justicia actúe de oficio para que comience la investigación para esclarecer esta alarmante situación.