De un tiempo a esta parte, la vida de Nino Dolce cambió. Según él, dejó atrás esa faceta que supo mostrar en Gran Hermano Famosos y ya no es lo que la gente vio. Ahora, habló acerca de lo que lo llevó a cambiar esa manera de ser tan particular. 

Corría el año 2007 cuando la producción del reality decidió realizar una edición con famosos. Entre ellos se encontraba Nino Dolce, quien en los 23 días que estuvo dentro del reality tuvo comportamientos polémicos que llevaron a la gente a sacarlo. 

Hace algunos años, él solía dedicar sus días a ser el chef de Playboy. Sin embargo, eso cambió y forma parte de su pasado. Tan es así que tuvo una reconversión tras un viaje al Amazonas que le cambió la vida. Y, pese a que todos lo conocen como Nino Dolce, este cambió lo llevó a modificar su nombre, ya que se hace llamar Noah Ben Sarah. 

Sobre la faceta que más se conoció de él, mencionó que forma parte de su pasado: “Después de tanta agua que pasó debajo del puente... Creo que todos merecemos una segunda oportunidad, ya no soy ese Nino sacado que salía, que estaba con la vedetonga”.

“Estamos hablando de más de siete años. Igual si no sale no sale. Dios sabrá por qué, tampoco es que me corto la venas, solo digo: ‘Lástima que no, no me han dado la chance de mostrarme otro lugar’”, expresó debido a su deseo de volver a los medios desde otro lugar pero con el impedimento de quienes los manejan. 

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En cuanto a su cambio, mencionó cómo fue que se dio luego de un vijae: “Ese viaje al Amazonas, haber estado prácticamente un año sin celular, conectado conmigo, reencontrarme, me sirvió para sacarme ese personaje tan enajenado que tenía de Nino y tener una conexión con Dios”. 

“Cada dos meses me mandaban al medio del monte, a estar solo en ayuno por varios días. Y esa falta de alimentos y esa soledad te conectan muchísimo con lo más elevado. Entonces cuando volví de ese viaje sentí adentro mío que lo tenía que catalizar porque algún lado. Y me cayó la ficha por ahí”, reveló sobre su experiencia. 

Sumado a esto, comenzó a visitar distintos templos. Es que tras una entrevista con Fantino, lo comenzaron a convocar: “Me preguntó Alejandro por qué no iba a la iglesia y ahí conté por primera vez que era de la cole. Llegué a mi casa y tenía mensajes de 50 rabinos para decirme que vaya a su templo. Para ellos es importante tener gente que es mediática para acercar a gente que está alejada”. 

“Voy mucho a templos a dar charlas sobre esta experiencia de cómo arranqué, de mi paso por Playboy, de que estuve súper expuesto, de que fui al Amazonas y estuve casi un año con los chamanes, de la ayahuasca. Eso me abrió la puerta a la espiritualidad, y les explico que a partir de eso la encaminé a la religión, que es como que te ordena un poquito las cosas”, explicó sobre su rol en la religión.

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