25/09/2022

Tragedia en la refinería: Los operarios fallecidos iban camino a la zona de resguardo

Un hecho previo alertó a los trabajadores. La investigación oficial confirmó que existió “un desencadenante” antes de la explosión.

Tragedia en la refinería: Los operarios fallecidos iban camino a la zona de resguardo

La tragedia ocurrida el pasado jueves 22/09 tiene en proceso la investigación que detallará los detonantes del incendio. La refinería NAO, ubicada a pocos kilómetros de Plaza Huincul ardió en llamas y dejó tres víctimas fatales.  

En la investigación en marcha se pudo constatar que algunos segundos antes de la explosión, se registró otro hecho que alertó a los operarios que se encontraban en la planta.  

El fiscal jefe, José Gerez, habló de la existencia de un desencadenante que alarmó a los trabajadores e hizo que se acercaran hacia la zona de resguardo. 

El hecho previo se corroboró a partir del testimonio que aportó un trabajador sobreviviente a la explosión y de la forma en la que se hallaron los cuerpos de los operarios, los cuales se encontraban en dirección a la sala de resguardo que posee la planta ante situaciones de riesgo. El fiscal confirmó que los trabajadores alcanzaron a percibir la existencia de algún peligro previo al incendio y el posterior estallido. 

Hubo un desencadenante previo que hizo que los operarios que se encontraban cubriendo el turno de la madrugada fueran hacia la sala de resguardo e intentaran accionar el botón de alarma para encender el sistema de seguridad hídrico, pero no lograron llegar porque la explosión los encontró en mitad de camino”, detalló Gerez, en diálogo con AM 550 y 24/7 Canal de Noticias de Neuquén. 

El fiscal manifestó que ahora la investigación “tiene el objetivo puesto en tratar de determinar qué fue ese hecho previo” y anticipó que, a partir de los datos aportados por el trabajador sobreviviente, “se habla de un zumbido fuerte antes de que comenzara el fuego”. De esta manera, “si la explosión hubiera ocurrido primero, no hubiéramos encontrado los cuerpos en dirección al sitio de resguardo”, concluyó. 

Las cámaras de seguridad, que aún no fueron observadas, son un elemento clave para para entender como fue la mecánica de la explosión, que contó con pocos testigos. 

Con la investigación tambien se pretende determinar si esas muertes pudieron evitarse y si tienen relación con alguna responsabilidad puntual. En cuanto los daños en la planta, el 45% de las instalaciones de la refinería se calcinó, mientras que en el resto solo se encontraron salpicaduras de combustibles.  

La fiscalía exigió el organigrama de la refinería a la firma propietaria, New American Oil. En las instalaciones trabajaban 40 operarios, de los cuales 3, se encontraban en el lugar al momento de la explosión y terminaron falleciendo: Gonzalo Molina, de 31 años, Fernando Jara de 34 y Víctor Herrera, de 58 y muy cerca de jubilarse. 

Junto a los peritos del Ministerio Publico Fiscal, se encuentra trabajando un grupo de especialistas enviados por la Secretaría de Energía de la Nación, el ente regulador en este tipo de locaciones industriales. 

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