Una familia roquense está viviendo días de mucha angustia y desesperación, a la espera de una respuesta por parte del sistema de salud que nunca llega. 

Juana tiene 40 años y, el pasado 15 de julio, le descubieron un tumor en la cabeza mientras se realizaba estudios en el hospital de Cipolletti. El pasado viernes, 23 de julio, le dieron el alta desde el hospital Francisco López Lima ya que, supuestamente, el lunes sería trasladada a Buenos Aires. 

"Le dieron el alta el viernes, le dijeron que esté dos días con su familia y que el lunes iba a ser derivada de urgencia a Buenos Aires. Ahora nos dicen que ahí no hay lugar, y que tenemos que esperar el ok para La Plata", explicó el esposo de Juana, a ANRoca.

"Ya pasaron muchos días y no puede seguir así. Me voy a encadenar en el hospital, alguien tiene que dar una respuesta. Ella está cada vez peor. No se puede levantar, no puede caminar. Con el tumor está perdiendo el oído, la estabilidad y la vista. No puede seguir esperando", expresó desesperado. 

Entre las respuestas que pide la familia, está la incertidumbre de por qué Juana fue dada de alta si no estaba en condiciones de estar en su casa. 

Según contó el hombre, su esposa solo cuenta con él y sus hijos de 20 y 11 años para cuidar y acompañar a Juana que los necesita en todo momento. 

"Nos acostamos y nos levantamos tristes, esperando una respuesta. Todos los días esperamos y nadie nos llama ni nos dice nada. No tenemos respuestas de nadie y ella sigue empeorando", agregó. 

El diangóstico del tumor llegó luego de que Juana fuese internada en el hospital de nuestra ciudad por una neumonía. Una vez que recibió el alta y regresó a su casa comenzó a sentir mareos e inclusó sufrió algunas caídas como consecuencia de la falta de equilibrio. 

Ante esta situación, regresó al López Lima, desde donde la derivaron a Cipolletti y le realizaron los estudios necesarios que, lamentablemente, confirmaron, el 15 de julio, que tenía un tumor en la cabeza. 

Con el dianóstico en mano, regresó a Roca y fue allí donde le dijeron que debía ser trasladada a un centro de mayor complejidad en Buenos Aires. 

Y desde ese momento, Juana y su familia esperan algún tipo de respuesta concreta por parte de las autoridades que ayude en la difícil situación que están atravesando.