Se multiplican las amenazas de bomba en los colegios ¿Se puede identificar a los autores?

Ocho amenazas de bomba en menos de un mes en el CET 1. Unas tres más que tomaron estado público en la ESRN 1 (Ex CEM 1) y otras tantas en el 150 que funciona en el Deportivo Roca. En este momento se encuentran desalojados el CET 1 (Ex ENET) en La Pampa entre Alsina y Artiga y la ESRN, en San Martín entre  Sarmiento e Italia. Ayer por la tarde pasó exactamente lo mismo en las mismas escuelas.

El director del CET 1, Fernando Erxilape, se encuentra además efectuando la denuncia pertinente en la Fiscalía. Por este tipo de situaciones puede intervenir la Fiscalía de Estado de la provincia, como demandante en su carácter de parte damnificada por los perjuicios al Estado.

En todos los casos las llamadas fueron reales, al igual que las denuncias, pero no existió ningún artefacto explosivo. En uno de los casos personal de Bomberos encontró un objeto "sospechoso" que solamente era una caja, sin nada peligroso en su interior.

La pregunta es ¿es posible identificar a los autores de estas llamadas? Hace unos meses, desde el Ministerio de Seguridad de la provincia de Río Negro aseguraron que era posible identificar al menos desde qué teléfono surgían las llamadas al 911 y también la zona. Incluso en algunos casos en que se dió con los autores de llamadas anónimas con denuncias falsas al 911, se enviaron notificaciones de cobro de multa.

La situación en la ciudad deja en claro que es urgente que se encuentre una solución. Cada vez que hay una amenaza de bomba se debe aplicar un protocolo para desalojar los establecimientos, y que el personal docente y no docente, junto al alumnado, permanezcan fuera del colegio. Mientras tanto Bomberos y Policía rastrean todo el establecimiento, en la búsqueda de un artefacto que, por suerte, jamás se encuentra.

Todo este movimiento, producto de un o unos "bromistas", genera un enorme trastorno, miedo entre las personas que se encuentran en el edificio, los padres de los alumnos, y además un enorme perjuicio por el desplazamiento de fuerzas públicas.

Por el momento no se sabe quién o quienes organizan este tipo de “bromas telefónicas”, que ya superan el límite de toda broma y se transforman en una maniobra imprudente e irresponsable. Si bien el folclore popular indica que este tipo de llamadas las realizan los alumnos cuando tienen una exámen y quieren que se suspenda, lo cierto es que la multiplicación de las denuncias es alarmante. Además los "graciosos" no tienen límite ni se condicionan a escuelas públicas o privadas, secundarias o primarias. En 2018 hubo denuncia de bomba en el colegio Domingo Savio, turno tarde,cuando solamente funciona la primaria, y este año en el María Auxiliadora-

"Ya son muchas denuncias en poco tiempo. Los chicos (alumnos) están muy enojados, ya están cansados de todo esto. No es solamente por el miedo, o por la preocupación que sienten los papás cada vez que pasa algo así, es también por la perdida de clases cada vez que esto pasa. Se pueden perder de dos a tres horas mientras se activa el protocolo", aseguró un profesor del CET 1. (ANR)