Podrían darle hasta 3 años de prisión a la ex titular del Ipross

Ayer, el fiscal jefe Andrés Nelli solicitó la pena de 3 años de prisión en suspenso y la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos para la extitular de la obra social Ipross, Adriana Gutiérrez,  por el delito de 'fraude en perjuicio de la administración pública mediante la administración fraudulenta”.

“Basándonos en lo que se ha ventilado en este debate y sumado a la investigación que el Ministerio Público Fiscal ha concretado, es que solicitamos para la contadora Gutierrez la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos y la pena de 3 años de prisión en suspenso”, expresó Nelli.

El poder judicial solicitó para la contadora Gutierrez la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos, más la pena de 3 años de prisión en suspenso, teniendo presente que no cuenta con antecedentes penales. El mismo tipo de inabilitación  también fue pedido por el fiscal para otro de los integrantes de la Federación de Clínicas y Sanatorios Privados de Río Negro.

“Ipross era representado por Gutierrez, ella era su presidente cuando se realizaron los dos contratos entre la Federación de Clínicas, la mutual rionegrina, “Corporación Atlantis” y “Droguería Eleón” para la provisión de medicamentos y prótesis varias”, describió el fiscal jefe.

“El Ipross no hizo ningún control previo de los contratos ni de las empresas con las que se estaban celebrando los mismos, recayendo en la señora contadora toda la responsabilidad de ello. No se consultó a fabricantes, ni a droguerías, ni al Colegio de Farmacéuticos. Sólo se sentaron, discutieron el contrato y se firmaron, sin haber realizado una licitación pública ni concurso de precios”, explicó.

Es así que se considera que Gutierrez “violó los deberes a su cargo, y de esta manera esas acciones resultaron dolosas para la sociedad rionegrina y para la provincia”.

Desde el Ministerio Público Fiscal indicaron que a lo anterior, también se le debe sumar que quedó demostrado a lo largo de la investigación que “las empresas que se contrataron para los insumos eran desconocidas, no estaban inscriptas en ningún registro de proveedores, ni contaban con historial en la AFIP, eran empresas fantasmas. Podemos mencionar en este punto que tanto la contadora de parte como la oficial dejaron en claro en este juicio que tanto “Corporación Atlantis” y “Droguería Eleón” no llevaban registros contables, que llamativamente previo a la inspección una de ellas había perdido los libros contables”.

Ahora resta conocer la sentencia del Tribunal conformado por Gastón Martín, Verónica Rodriguez y Emilio Stadler. (ANR)