Trabajo e inclusión en el INTA

Allen.- Desde el 26 de noviembre, en cumplimiento de la Ley Nacional N° 22.431 / 1981, "Sistema de protección integral de los discapacitados”, la Estación Experimental Agropecuaria Alto Valle del INTA incorporó a un joven con capacidades diferentes, como pasante en el sector administrativo.

Fernando González tiene 35 años e ingresó por tres meses en forma no rentada a la Estación Experimental, donde se dedica al control y armado de documentación contable. Desde el Centro de Inclusión Laboral al que asiste, su coordinadora, la Licenciada Ivana Vargas destacó que "el INTA es el primer organismo nacional que toma a una persona con discapacidad en la zona del Alto Valle”, ya que las demás inclusiones de jóvenes y adultos preparados por este Centro se han dado en empresas e instituciones del orden local.

Tranquilo, pausado al hablar, muy observador y atento en escuchar al otro, Fernando cuenta que desde que trabaja en el INTA está muy cómodo, en un lindo ambiente de compañerismo, que quiere aprender más y que su ánimo cambió muchísimo al estar ocupado. Esta es la segunda pasantía que realiza, ya que inicialmente trabajó en un supermercado como repositor.

"Desde la Experimental estamos muy conformes con el trabajo que desarrolla Fernando y, además, tenemos la expectativa que vaya incorporando más actividades y que continúe creciendo en lo personal”, expresó la contadora Mariana Amorosi, administradora de la Estación Experimental,

Fernando asiste desde hace dos años al Centro de Inclusión Laboral de la Asociación Civil Patagónica de Síndrome de Down (APASIDO), asociación civil sin fines de lucro, presente en las provincias de Río Negro y Neuquén. Dicha entidad cumplió su sueño de crear el Centro en 2011, "como respuesta a la demanda de un grupo de jóvenes con síndrome Down en edad de trabajar, y posteriormente se incluyó a personas con otros tipos de discapacidad motriz e intelectual.

Desde  la Asociación se hizo hincapié en que para llevar adelante este tipo de proyectos es imprescindible contar con la colaboración y compromiso de muchas partes: por un lado, el Centro de Inclusión y APASIDO como responsables de proponer el proyecto, por otro, instituciones como el INTA, facilitando la inclusión laboral. A ellos se suma un equipo de profesionales que realiza el seguimiento del proceso de inclusión, en capacitación permanente con el pasante.

Por su parte en Ing. Agr. Jorge Toranzo, Director de la EEA Alto Valle, expresó su deseo de que éste tipo de iniciativa sirva como ejemplo para estimular acciones similares en instituciones públicas y privadas de la zona.

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