El año pasado, el sistema judicial de Río Negro recibió más de cinco mil legajos en sus Oficinas Judiciales penales, revelando una cifra significativa de casos legales en la provincia. Sin embargo, entre estos, un pequeño porcentaje involucró a niños, niñas y adolescentes, según informa el Informe Estadístico Anual del Centro de Planificación Estratégica del Superior Tribunal de Justicia (STJ).

De las 38 causas iniciadas en 2023, 29 de ellas implicaban a menores de edad, con un total de 27 varones y dos mujeres. Sorprendentemente, once de estos jóvenes tenían 16 años al momento del hecho, mientras que 18 tenían 17 años.

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Los delitos imputados abarcaron una gama variada, desde delitos contra las personas hasta delitos contra la propiedad y la integridad sexual.

Entre los datos más preocupantes, destaca que 19 de los menores participaron en delitos junto a adultos, 11 tenían antecedentes de conducta delictiva y 18 habían sido objeto de intervenciones por parte de otros organismos estatales.

La distribución geográfica de los casos revela que la mayoría se registraron en la Tercera Circunscripción de Bariloche, con 20 casos, seguida por la Primera Circunscripción con sede en Viedma, con nueve casos. Las restantes se dividieron entre la Segunda Circunscripción en Roca y la Cuarta Circunscripción en Cipolletti.

Aunque se dictaron cinco sobreseimientos y una absolución, además de cinco medidas alternativas, hubo un total de 39 sentencias dictadas en 2023 a personas mayores por delitos cometidos cuando eran menores de entre 14 y 17 años.

Estas cifras, recopiladas por el equipo de trabajo creado por el Poder Judicial de Río Negro en 2020 para monitorear la Justicia Penal Juvenil en la provincia, arrojan luz sobre la importancia de abordar de manera integral y colaborativa los desafíos que enfrentan los jóvenes en conflicto con la ley.