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Brutal crimen: Un hombre y sus dos hijos a juicio
La víctima era sobrino y primo de los imputados quienes podrían ser condenados a perpetua. En 2014 el joven llegó con su novia al hospital y murió en el interior del auto en el que lo trasladaron. Fuerte operativo policial.
Con la declaración de cinco testigos comenzó esta mañana el juicio contra Ítalo Etchegaray y sus hijos Leandro y Rubén, quien están acusados de asesinar a Víctor "Nano" Etchegaray (sobrino y primo de los sospechosos) en un sangriento hecho ocurrido en 2014.
El terrible hecho salió a la luz el 31 de octubre de ese año cuando un VW Gol de color gris apareció raudamente en el hospital Francisco López Lima pasado el mediodía. Lo conducía la novia de la víctima y en el asiento de atrás se encontraba el muchacho de 27 años quien sufrió varios impactos de bala que le provocaron la muerte minutos después.
Cuando el vehículo estacionó a pocos metros de la sala de guardia, el joven ya no presentaba signos vitales.
A partir de allí se inició una investigación que terminó vinculando al resto de los integrantes de la familia Etchegaray quienes habrían llevado adelante el crimen por distintos hechos vinculados a la venta de estupefacientes en la zona de norte de la ciudad.
A Ítalo Elio Etchegaray se le imputa el delito de "homicidio calificado por el concurso premeditado de más de dos personas, agravado por el uso de arma de fuego". A su hijo Rubén, "homicidio calificado por el concurso premeditado de más de dos personas, agravado por el uso de arma de fuego" y como presunto autor del delito de "homicidio en grado de tentativa, agravado por el uso de arma de fuego y portación de arma de fuego de guerra sin la debida autorización legal, todo en concurso real"; en tanto que a Leandro se le imputa "homicidio calificado por el concurso premeditado de más de dos personas, agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con portación de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal".
Los tres están cumpliendo prisión preventiva y procesados por un concurso de delitos que el Código Penal reprime con prisión perpetua.
Fueron tres los testigos que esta mañana declararon ante los jueces que integran la Cámara Primera del Crimen, en el proceso que se desarrolla en el subsuelo del edificio de tribunales. Otros dos pidieron hacerlo a puertas cerradas por lo que no se permitió el ingreso de los medios de comunicación.
Varios familiares de la víctima y de los acusados colmaron la sala en medio de un fuerte operativo que incluyó más de 15 efectivos policiales quienes resguardaron la llegada y la partida de los tres imputados. (Ampliaremos-ANR)
