Alumnos de un Jardín llevan su reclamo por la calidad del agua

“En el agua, tenemos los bichitos que están en la caca”. La frase de una pequeña del Jardín N°67 refleja -en resúmen- la preocupación de la comunidad educativa de los distintos establecimientos educativos que se encuentran ubicados en barrio Romagnoli de nuestra ciudad.

El reclamo, no es nuevo. Desde hace tiempo que las autoridades, los padres y los alumnos le están pidiendo al Ministerio de Educación y a cuanta autoridad que pasa por el colegio que solucionen los problemas.

Es que los estudiantes de todos los niveles (jardín N°67, Escuela Primaria N°86 y CEM N°106) no tiene agua potable. Y el pozo del cual logran captarla está contaminado por los desagües que afectan las napas y no les permite lograr un fluido para el consumo humano.

Es por eso que desde Educación les están suministrando desde hace un tiempo ya, los clásico bidones con agua potable aunque para la limpieza y el lavado de manos se sigue utilizando el agua contaminada que extraen del pozo, explicó una de las docentes.

Esto quiere decir que a pesar de que no la consumen, con ese fluído se limpia el piso, las mesas y los chicos se lavan las manos por lo que los microbios siguen estando en contacto diario con los estudiantes.

Frente a esta situación, los docentes y alumnos del Jardín N°67, comenzaron una campaña con dibujos y visitas a distintas instituciones para intentar concientizar sobre los problemas que padecen en la potabilidad del agua. Así llegaron hace algunos días a la biblioteca del barrio La Rivera, donde expusieron sus dibujos y llevaron sus necesidades.

“No podemos tomar el agua”, comentó otro de los pequeños a ANR, quien junto a sus compañeros detallaron los problemas y las necesidades que desde años padecen los pequeños.

El objetivo es llevar nuevamente a debate la calidad del agua que tiene la escuela y los inconvenientes que a diario padecen los alumnos que asisten al predio ubicado en calle Nahuel Huapi y Romagnoli, en uno de los barrios más habitados de la ciudad.

La fresca campaña de los pequeños continuará mañana en Paso Córdoba y la próxima semana en Chacra Monte.

Solución frustrada

En mayo, el Ministerio de Educación ordenó los trabajos para que la perforación de captación de agua sea más profunda. El objetivo era lograr un pozo superior a los 8,5 metros pero la maquinaria que habían llevado no cumplió su objetivo y no pudieron romper el material con el que se encontraron a esa profundidad.

En resúmen, por ese entonces no había recursos para lograr extraer agua de mejor calidad, por lo que no lograron solucionar el drama de la potabilidad del agua.

Los chicos cuentan sus problemas con el agua y también practicaron una canción para que los escuchen las autoridades de Educación. (Fotos y Video Patagonia Fotopress)