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| 16/10/2016

Radiografía social: "ser mujer y ser madre es condición de desigualdad"

Un trabajo realizado por una organización sin fines de lucro refleja que las mujeres sufren profundas inequidades en materia de educación, empleo y salud; sufren más pobreza y perciben menos ingresos.

El 37% de las madres integran la población de ingresos más bajos
Foto archivo Patagonia FotoPress
Foto archivo Patagonia FotoPress

En el día de la madre, reproducimos un interesante informe que grafica la realidad de las mujeres madres argentinas, publicado el 11 de octubre y elaborado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas por la Equidad y el Crecimiento. 

Según Gala Díaz Langou, directora del Programa de Protección Social de Cippec, “mientras las mujeres están en peores condiciones en los principales ámbitos de la vida, esto se acentúa en aquellas que son madres. Ser mujer es condición de desigualdad. Ser madre, aún más”.

 

El 53% de las mujeres en edad fértil (14 a 49 años) son madres. Aunque este rango etario no engloba a la totalidad de madres, es el de mayor prevalencia de embarazos (CIPPEC, en base a EPH 2015-II):

Las madres concentran las peores condiciones de ingresos (CIPPEC, en base a EPH 2015-II; mujeres de 14 a 49 años)

Las madres trabajan más, al sumar su labor dentro y fuera del hogar. Las mujeres, y principalmente las madres, trabajan más en tareas no remuneradas. Se debe fundamentalmente a que las mujeres siguen siendo responsabilizadas como las encargadas de la crianza y el cuidado infantil en las familias. Además, las madres se ven más afectadas por la informalidad, precariedad, e intermitencia laboral.

La tasa de mortalidad materna argentina en 2014 fue de 3,7 madres fallecidas por cada 10.000 nacidos vivos (DEIS, 2015).

Según este informe, para revertir esta situación es necesario promover dos tipos de políticas:

1- Mejorar la forma en la que las familias concilian la vida productiva con la reproductiva.

Modificar el régimen de licencias por maternidad y paternidad, para que todos puedan acceder a ellas y para que la responsabilidad del cuidado este mejor distribuido entre padres y madres (o cualquier confirmación de familia). 

Que los espacios de primera infancia y los jardines maternales que se van a crear en el marco del Plan Nacional de Primera Infancia tomen en consideración dónde se encuentran las madres con mayores necesidades para acceder a estos servicios.

El acceso a servicios públicos de cuidado y educación de calidad puede contribuir a aligerar la carga que tienen las mujeres que son madres, garantizando sus derechos, y además permitiéndoles una mayor continuidad educativa o una mejor inserción laboral.

2- Fortalecer el acceso a los derechos sexuales y reproductivos.

“El incumplimiento del Objetivo de Desarrollo del Milenio debe ser un llamado de atención. Urge que Argentina coloque en el centro de su agenda el embarazo adolescente que se encuentra en ascenso”, explica Olivia de Achával, analista del Programa de Protección Social de Cippec.

Para combatir esta tendencia es necesario promover una estrategia más potente de difusión de la información en todo el territorio (basándose en el Programa de Educación Sexual Integral), un mejor acceso a métodos anticonceptivos y atención en salud (a través del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable) y garantizar el acceso libre, oportuno y seguro a la interrupción legal del embarazo garantizada por Ley.

Fuente: Cippec. Organización independiente y sin fines de lucro que concentra sus esfuerzos en analizar y promover políticas públicas que fomenten la equidad y el crecimiento en la Argentina.  Visitar sitio web. 

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