Confirman condena por intento de homicidio y lesiones en Roca

El imputado Ángel Alejandro Mora había sido condenado el 8 de julio de 2015 por la Cámara Criminal Segunda de esta ciudad, que lo declaró “autor de los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego, en concurso ideal con tentativa de homicidio agravada por el uso de arma de fuego, en concurso real con portación de arma de fuego de uso civil sin la autorización legal, en concurso ideal con encubrimiento”.

Ese fallo fue ratificado el pasado 21 de abril por el STJ, que declaró mal concedido el recurso de casación que había interpuesto la defensa oficial.

El hecho ocurrió en la calle Defensa de Roca, cuando Raúl Rafael Segura y Leónidas Castillo transitaban en moto. Según la imputación “habrían sido interceptados por Mora, quien se movilizaba en una motocicleta 110 cc., el cual detuvo su marcha y extrajo de entre sus ropas un revólver calibre 22 (…) que portaba sin la debida autorización legal y, con la intención de darle muerte, le habría efectuado varios disparos, impactándole uno de ellos a Segura (…) quien sufrió una herida con orificio de entrada en el flanco izquierdo sin orificio de salida, debiendo ser intervenido en el nosocomio local donde se encontraba con pronóstico reservado”.

En el juicio la fiscalía amplió la acusación, dando por probado que los disparos habían sido, en realidad, dirigidos contra Castillo.

La defensa atacó la sentencia alegando arbitrariedad y cuestionando la ampliación de la acusación en el juicio y, finalmente, solicitó que se absuelva a Mora del delito de tentativa de homicidio contra Castillo y se le imponga la pena mínima por las lesiones graves sufridas por Segura. Además, solicitó la inmediata libertad del imputado, atento al tiempo de detención que lleva cumplido.

En su sentencia, la Cámara roquense concluyó que Mora disparó con la intención de matar a Castillo y falló, hiriendo de gravedad a Segura. Dieron por acreditado que esa tarde Mora “descendió de la moto, se paró a corta distancia, apuntó y disparó un arma de fuego de potencialidad letal” en tres o cuatro oportunidades, verificándose un “dolo directo de matar a uno y el dolo eventual de lesionar al otro”. (ANR)