Una joven roquense habría sido abusada sexualmente en Playas Doradas

“Desde que llegué a Roca no salgo a ningún lado, voy a todos lados con mi mamá y mi papá; y hace una semana que no duermo de noche. Me levanto gritando y llorando, me agarran pesadillas y se me viene la cara del tipo y partes de ese momento”. “Yo ya no voy a ir a boliches, ni salir a tomar algo, ni a caminar”. Así relató su testimonio la estudiante de abogacía, quien denunció ser víctima de un abuso sexual en Playas Doradas. 

Acompañada por su madre, policía retirada; la joven -oriunda de las 260 viviendas- reconstruyó el suceso en un conmovedor relato. “Ojalá vaya preso y no toque a nadie más, es horrible, es una situación re incómoda. Yo como mujer me siento humillada”, sentenció. 

El 12 de enero había ido con su familia a la localidad turística para trabajar durante la temporada en el rubro venta de bijouterie y accesorios de moda.

Tenían previsto permanecer allí hasta mediados de febrero para participar de la Fiesta de Playas Doradas donde se postularía como candidata a reina. Tres días después de haber llegado a la localidad, el viernes 15, cumplía 20 años. Esa noche fue con sus primas al único pub en toda la localidad. 

Apenas llegaron se les acercó un hombre mayor alegando conocerlas desde chicas y que prestaba servicios en ese local. En el transcurso de la noche, insistió, les habló, les preguntó cosas sobre la familia mientras atendía la barra. Alrededor de las 5:30 la joven acompañó a una de sus primas al baño y la esperó afuera.

“En ese momento se acercó este hombre, le empieza a hablar cada vez mas cerca, ella no le daba bolilla porque ya había estado bastante pesado toda la noche y en determinado momento la llevó a la cocina, la levanta en brazos y la empieza a manosear. Después le quiso bajar el pantalón. Pero ella alcanzó a agarrar un fierro o algo así y forcejearon hasta que logró escapar”, relató la madre.

No pudo gritar, no le salió. Escapó corriendo hacia afuera donde se encontró con su prima. La joven resultó lesionada: entre otras lastimaduras, le quedó un rasguño en el brazo de más de 20 cm.

Huyeron en dirección a la playa buscando gente. Tenían miedo de que las siguiera. Corrieron, pero el sujeto las alcanzó. Cuando las encontró les dijo "pará flaquita, mirá en el quilombo en que me metiste, es un malentendido, yo te quería explicar lo que nunca te tenes que dejar hacer'”, narró la mamá. 

Desde la playa se dirigieron al destacamento policial para hacer la denuncia, y cuando salían se encontraron nuevamente con el sujeto. Esta vez insistió en que todo había sido un "malentendido". 

Reapareció por tercera vez en la casa donde se alojaban, allí insistió con sus argumentos. La policía lo notificó luego de la denuncia y le informó que debía esperar el trámite judicial. “La intención del tipo era que ella no denunciara”, opinó la mamá. 

Al día siguiente, armaron sus cosas y se volvieron a Roca, con un nudo en la garganta. 

Según el relato de las mujeres, el sujeto es familiar directo del propietario del local. “Dicen que tiene esa costumbre de pasarse de vivo con las chicas”, sostuvo la mamá.

Conocen la identidad del sujeto y por lo que pudieron averiguar, se trataría de un hombre muy renombrado en Sierra Grande. “Parece que es medio intocable, siempre anda mezclado con gente de la política que es bastante influyente” aseguró la ex policía.  

“Yo prácticamente no duermo desde ese día. Porque vos ves tantas cosas que están pasando... si mi hija no se hubiese podido escapar todavía la estamos buscando por Playas Doradas” aseveró la madre.  “Vamos a hacer todo para que esto no quede en la nada”.

Ahora, la causa está en manos de la justicia. Interviene el Juzgado de Instrucción n° 4 de Viedma, a cargo de Carlos Mussi y la Fiscalía Temática n° 1. El caso está caratulado como "abuso sexual, sin acceso carnal”. (ANR)